

Los bienes del extraditado esmeraldero y narcotraficante Horacio Triana Romero volverán a manos de su familia tras una decisión judicial que responsabiliza a la Fiscalía General de la Nación por exceder los plazos legales en un proceso de extinción de dominio.
La jueza 24 de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad, Claudia Luisa Velandia, determinó que el ente acusador superó con creces el tiempo previsto en la ley para definir el futuro de los activos incautados en 2020, sin que presentara la demanda correspondiente ni archivara el caso.
La medida ordena la restitución de propiedades y sociedades que en su momento fueron intervenidas por las autoridades, entre ellas dos empresas (Mercallanos Supermercados Ltda. y Emagacons S.A.), además de haciendas, apartamentos en Bogotá y Boyacá, vehículos de lujo, camiones, motocicletas, más de 300 reses y una cuenta bancaria.
Horacio Triana fue extraditado a Estados Unidos en enero de 2019 y cumple allí una condena de 14 años por narcotráfico y conspiración. No obstante, la negligencia procesal en Colombia permitió que su núcleo familiar recupere un patrimonio de alto valor económico.
Uno de los herederos directos de esos bienes es su hijo, Eduar Alexis Triana Rincón, actual representante a la Cámara por Boyacá del partido Centro Democrático.


𝐸𝑙 𝑔𝑟𝑒𝑚𝑖𝑜 𝑚𝑖𝑛𝑒𝑟𝑜 𝑐𝑜𝑛𝑓𝑖𝑟𝑚𝑜́ 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑠𝑡𝑒 𝑙𝑢𝑛𝑒𝑠 4 𝑑𝑒 𝑎𝑔𝑜𝑠𝑡𝑜 𝑠𝑒 𝑙𝑙𝑒𝑣𝑎𝑟𝑎́ 𝑎 𝑐𝑎𝑏𝑜 𝑢𝑛𝑎 𝑗𝑜𝑟𝑛𝑎𝑑𝑎 𝑑𝑒 𝑝𝑟𝑜𝑡𝑒𝑠𝑡𝑎 𝑒𝑛 𝑣𝑎𝑟𝑖𝑜𝑠 𝑚𝑢𝑛𝑖𝑐𝑖𝑝𝑖𝑜𝑠 𝑑𝑒 𝐵𝑜𝑦𝑎𝑐𝑎́ 𝑦 𝐶𝑢𝑛𝑑𝑖𝑛𝑎𝑚𝑎𝑟𝑐𝑎. 𝑆𝑒𝑔𝑢́𝑛 𝑒𝑙 𝑚𝑎́𝑠 𝑟𝑒𝑐𝑖𝑒𝑛𝑡𝑒 𝑐𝑜𝑚𝑢𝑛𝑖𝑐𝑎𝑑𝑜, ℎ𝑎𝑏𝑟𝑎́ 𝑝𝑢𝑛𝑡𝑜𝑠 𝑑𝑒 𝑐𝑜𝑛𝑐𝑒𝑛𝑡𝑟𝑎𝑐𝑖𝑜́𝑛 𝑞𝑢𝑒 𝑝𝑜𝑑𝑟𝑖́𝑎𝑛 𝑐𝑜𝑛𝑣𝑒𝑟𝑡𝑖𝑟𝑠𝑒 𝑒𝑛 𝑧𝑜𝑛𝑎𝑠 𝑑𝑒 𝑏𝑙𝑜𝑞𝑢𝑒𝑜 𝑣𝑖𝑎𝑙.
En respuesta a la crisis que afecta al sector del carbón en los departamentos de Boyacá y Cundinamarca, voceros del gremio minero reiteraron que este lunes 4 de agosto se realizará una movilización masiva que incluirá marchas y puntos de concentración en distintas localidades. Aunque los organizadores insisten en el carácter pacífico de la protesta, se prevé que algunos tramos viales importantes puedan verse bloqueados temporalmente por la presencia de manifestantes.
Uno de los principales puntos de concentración estará ubicado en Paipa. La marcha comenzará a las 7:00 a. m. desde el puente sobre el río Chicamocha y avanzará por la calle 25 hasta las inmediaciones de la Glorieta del Cementerio, en la salida hacia Tunja. Este sector ha sido identificado como el epicentro de la jornada.
El comunicado emitido por el comité organizador también señala que delegaciones provenientes de otros municipios de Boyacá y Cundinamarca se sumarán a la jornada con puntos de encuentro propios, aunque sin precisar sus ubicaciones exactas.
Desde las cinco de la mañana está bloqueado el paso por la doble calzada, en ambos sentidos, a la altura del Puente de Boyacá. Este bloqueo es realizado por los campesinos parameros.
Durante la manifestación, los organizadores aseguran que se habilitará un corredor humanitario con el objetivo de garantizar el acceso a servicios esenciales y evitar afectaciones críticas a la movilidad de emergencia. Además, han solicitado a las autoridades que se respeten las garantías constitucionales del derecho a la protesta pacífica.
El paro minero, convocado como medida de presión ante lo que consideran el abandono del gobierno nacional, se da en un contexto de creciente inconformidad por el cierre de minas, la caída en los ingresos de las familias del sector y la falta de respuestas concretas en las mesas de diálogo.


𝐺𝑜𝑏𝑖𝑒𝑟𝑛𝑜 𝑐𝑜𝑛𝑣𝑜𝑐𝑎 𝑛𝑢𝑒𝑣𝑎 𝑟𝑒𝑢𝑛𝑖𝑜́𝑛 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑒𝑙 5 𝑑𝑒 𝑎𝑔𝑜𝑠𝑡𝑜 𝑡𝑟𝑎𝑠 𝑓𝑎𝑙𝑙𝑖𝑑𝑎 𝑠𝑒𝑠𝑖𝑜́𝑛 𝑐𝑜𝑛 𝑒𝑙 𝑠𝑒𝑐𝑡𝑜𝑟 𝑐𝑎𝑟𝑏𝑜𝑛𝑒𝑟𝑜.
La más reciente tentativa de diálogo entre el Gobierno Nacional y los representantes del sector minero del centro del país terminó abruptamente en Paipa, luego de que los voceros de los gremios de Boyacá y Cundinamarca se retiraran de la reunión al constatar la ausencia de altos funcionarios.
El encuentro, convocado por el Ministerio del Interior con el propósito de abordar la crisis que atraviesa la industria carbonera, se disolvió en apenas 20 minutos. Según los asistentes, se había prometido la presencia de ministros o viceministros con capacidad de decisión, compromiso que no se cumplió.
Más de cien representantes del sector se desplazaron hasta Paipa con la intención de exponer un pliego de peticiones que incluye el cese de acciones que consideran hostiles contra la actividad minera, la revisión del régimen tributario y soluciones urgentes frente a la caída en los precios del carbón y la falta de compradores.
Ante la falta de interlocución efectiva, los voceros del gremio decidieron levantarse de la mesa y ratificar el inicio de un paro nacional a partir del lunes 4 de agosto, como medida de presión para que el Gobierno Nacional atienda con seriedad la situación.
Mientras tanto, la Alcaldía de Paipa informó que se convocará una nueva reunión para el martes 5 de agosto, en la que se espera la asistencia de funcionarios de alto nivel, así como de representantes de la Agencia Nacional de Minería y otras entidades competentes. Sin embargo, el gremio minero insiste en que las jornadas de protesta iniciarán conforme a lo anunciado.